martes, 28 de julio de 2009

Martes

La sábana sigue enrollada como una Cascabel sobre mi cintura, dando vueltas sobre mis piernas, no quiere que la abandone. Hago un esfuerzo por volver a cerrar los ojos, pero tú me vuelves a mirar y vuelvo a odiarte. Porque, como cada mañana, acechas en mis pupilas y necesitas que te mire, que disfrute bajo tus brazos. Dispongo mis pies en el suelo, esperando que esté frío, esperando un cosquilleo, pero vuelve a estar caliente. Me miro al espejo con la suave luz que me das, paso la mano por mis rizos para que dejen de estar enmarañados, y salgo a visitarte. Con la poca fuerza que me queda, levanto la persiana y tus rayos se van colando entre mis ropas. Me das calor, y sonrío, hoy también estás ahí, saludando a quien te quiere ver.

2 comentarios:

  1. simplemente me encanta!!tqq!
    açó es mel de romer.
    Ché que bo!
    jeje aprendo rapido!

    Paloma!

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  2. y le miras así, de frente, sin protección ni nada? ;)

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